Testamento

Porque me despido de esta tierra, dejo mi testamento que podrá ser tildado de negativo en este momento, pero dentro de quince años podrá ser juzgado como dolorosamente realista.



Ni pesimista ni optimista, sino todo lo contrario
Manuel Caballero parafraseando a
Luís Echeverría Álvarez, Presidente de México

Testamento
  • Dejo a mis compatriotas un pueblo sin voz, no porque se la callaron, sino porque decidió delegar la responsabilidad a otros.

  • Dejo a mis compatriotas una estructura laboral donde el profesional de segundo nivel –y de tercer nivel- ya no tiene cabida pues ahora los gerentes poseen en su haber títulos de primer nivel o inferior.

  • Dejo a mis compatriotas un conglomerado de partidos políticos que no han entendido que la forma de hacer política cambió en el mundo, y seguimos ejerciendo el oficio como hace 40 años atrás.

  • Dejo a mis compatriotas un país donde se está dando a la amnistía los espacios que por naturaleza deberían corresponder a la justicia, y donde no habrá ningún tipo de acción jurídica sobre las violaciones de DDHH resultantes del ejercicio del poder.

  • Dejo a mis compatriotas un pueblo que hace de un drama un chiste, y que dolorosamente celebramos, evadiendo continuamente la responsabilidad personal frente a los acontecimientos que requieren atención.

  • Dejo a mis compatriotas la actitud retadora y de reclamo al universo caracterizado por el inmaduro “por qué me pasa esto a mí” y de inmediata atribución de culpas al vecino porque “yo no rompo un plato”.

  • Dejo a mis compatriotas un canto continuo de elegía a Venezuela, pero que no se manifiesta en el comportamiento cotidiano de respeto, consecución y acción pro-activa y constructiva.

  • Dejo a mis compatriotas una geografía inigualable, pero poco querida por poco conocida pues es más cómodo ver la televisión en casa que salir a explorar nuestras bellezas.

Dejo y suscribo las críticas que mis compatriotas agreguen a esta pequeña lista, que es expresión de preocupación, de conciencia de nuestra realidad y de lo que debemos cambiar.

Lista que es expresión de esperanza pues la formulación de comportamientos erróneos indica el camino a seguir para mejorar, porque creo firmemente que la democracia es perfectible, y el hombre también.